lunes, 3 de agosto de 2009

TODAVIA A TIEMPO

A partir de La Transición, los partidos políticos, han olvidado su función de aportar fórmulas de progreso social, y se han dedicado a vigilar al contrincante, a enmendarle la plana, y a exigir lo que el otro tiene que hacer. Se olvida la libertad de pensamiento, acción y propagación, que asiste a los ciudadanos y los partidos. Cada uno que haga lo que sepa y quiera y los ciudadanos ahora y la Historia mañana, juzgaran sus acciones.

ETA cae en la misma senda, y en carta al Presidente Rodríguez, le dice que “la negociación es el único camino que puede conducirnos a un escenario de paz estable y definitivo” y le hace un llamamiento a “no caer en el error de cerrar las puertas a una solución negociada y democrática del conflicto”.

Deje ETA al Presidente Rodríguez, que haga lo que su conciencia y sus circunstancias le permitan, y aplíquese la receta.

Si la negociación es el único camino ¿a que viene la lucha armada? La paz no vendrá de acciones guerreras si no de negociaciones. Entonces ¿para que continuar a tiros?

¿Qué mayor error de cerrar puertas puede haber, que arrancar vidas, haciendas, tranquilidades familiares, por medio del terrorismo armado?

ETA ya cumplió su misión histórica anti-franquista. Su deficiente visión política de la Transición y su apuesta equivocada KAS, le impidieron retirarse a tiempo y dejar camino para que líderes políticos y autoorganización popular, constituyeran la nueva referencia de una izquierda patriótica vasca del siglo XXI en la UE.

Hoy día, ese trágico anacronismo, solo sirve para agravar la situación de los vascos. Por su camino armado solo llega represión y falta de esperanza.

Ya no cabe una vanguardia armada, pues 25 años de práctica armada contra régimen democrático europeo, han dado reiteradamente una mayoría abrumadora a PNV, PSE, PP, segmento social que no tiene ninguna afinidad con la independencia socialista vasca, y por el contrario, sólo unos 200.000 ciudadanos responden a esos esquemas y son ciudadanos tan comprometidos y concienciados que no requieren de vanguardias conductoras. Este 10% social vasco, no tiene capacidad alguna de imponer soluciones al conjunto de EH, ni aún con el refuerzo armado.

Consciente de este análisis objetivo, del suyo propio, y de su manifestada “firme voluntad de paz”, ETA debe unilateralmente “desactivar la lucha armada y desmantelar sus estructuras militares» olvidando negociaciones, que, cual moderno Pacto de Santoña, no le traerán mas que catástrofes y desprestigio.

Esta ekintza, única posibilista y benéfica para EH, es la que la Historia demanda a los responsable de ETA en el siglo XXI.

Lanzar nuevamente otra oleada de jóvenes patriotas al terrorismo y la destrucción, hoy que ya se sabe infructuosa, será un delito de lesa patria que la Historia no perdonará.

Josu Aizpurua

Ex Secretario Gral. de ANV-EAE

Ex Miembro de la 1ª Mesa Nacional de HB

Ex Parlamentario Vasco de la 1ª Legislatura

A 24 de Junio 2007

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